Naruto addicted
Pues sí. El primer paso es admitirlo. LLevaba años oyendo hablar de esta serie, pero nunca me había decidido a verla (a veces me cuesta mucho arrancar con una serie nueva, porque me conozco y sé lo que pasa si me gusta). Pero no podía evitarse, tenía que llegar el día en que cayera en mis manos algún capítulo de Naruto. Esta vez el culpable fue mi hermano.
Al principio no me pareció que la serie fuera para tanto (en muchos sitios dicen que es de lo mejor que hay últimamente). Estaba bien, entretenida, y lo que más me llamó la atención fue lo cuidada que está la animación, sobre todo en algunas escenas. Pero según fue avanzando la trama, se volvió cada vez más interesante. Y luego descubrí que en Youtube están todos los capítulos con una calidad razonable y me vi los 220 de la primera parte casi de un tirón (en detrimento de mis horas de sueño). Hay que decir que los últimos 100 capítulos o así son de relleno (aunque están bien y sirven para conocer un poco mejor a los personajes, que son muchos) y la historia no avanza casi nada.
Y después me puse a ver la segunda parte, Naruto Shippuden, en la que el protagonista es dos años mayor que en la primera. Empieza muy fuerte y me tiene en vilo, porque acaban de estrenarla en la tele en Japón (hoy ponen el capítulo 11) y ya no me queda otra que ir a capítulo por semana (como con Héroes). Mejor, porque así no me quita tanto tiempo. Aunque no creo que sea capaz de resistir la tentación y no leer los mangas.
La gente dice que se parece mucho a Bola de Dragón, pero la verdad es que yo le veo más similitudes con Harry Potter (tanto en el entorno como en los personajes). Y no lo puedo remediar, me encanta la clásica historia del héroe y su búsqueda personal (porque tanto Harry Potter como Naruto son ejemplos de libro). Eso sí, todavía estoy intentando encajar la época en la que se desarrolla la serie. Al final me decanto por un mundo imaginario con tradiciones japonesas y tecnología médica y electrónica de última generación, pero sin coches y dominado por señores feudales (sí, lo sé; no tiene mucho sentido... ¡pero mola!).
El caso es que de momento la segunda parte me está gustando muchísimo más que la primera. Os dejo el opening de Naruto Shippuden (me encanta, no me canso de verlo... la animación de esta serie es cojonuda), para abrir boca. ¡Espero que os guste tanto como a mí!